lunes, 27 de abril de 2009

CINE 'HORRIBLE'

Esta semana, dedicamos nuestra infame atención a ese particular fenómeno del cine tan ineptamente realizado que lejos de espantar el interés del público lo atrae. Entretenimiento algo enfermizo, sí, pero a menudo acompañado de humor, y la nada desdeñable cualidad de obligarnos de vez en cuando a preguntarnos si de verdad estas películas son tan malas, cuando hay por ahí productos de mucho más presupuesto y publicidad que solo consiguen aburrirnos de indiferencia o colarnos dudosos mensajes, por muy profesionalmente hechos que estén...

El hombre que salva a la Tierra, popularmente conocida como ‘La guerra de las galaxias turca’, casi podría pasar por cine experimental o arte de vanguardia. Casi: está demasiado claro que ésa no era la intención del director Çetin Inanç, pero por otro lado no hay modo de justificar racionalmente el descarado e incomprensible uso (sin permiso) de metraje y música de películas americanas, el ridículo aspecto de los monstruos, el esquizofrénico ritmo del montaje, o la obsesión constante por cerebros y repetidas destrucciones de la Tierra. En vez de resultar tedioso, el film avanza cual apisonadora desbocada sobre la incredulidad del espectador, que inocentemente cree que nada puede sorprenderle hasta que la siguiente barbaridad cinematográfica ocurre en la pantalla... Oh, y es dudoso que exista otra parodia del cine de Lucas y Spielberg ni la mitad de subversiva que ésta. Intencionada o no.

Edward D. Wood Jr. es una figura fascinante, pero quienes se acercan por primera vez a su cine pueden verse decepcionados: no es tan malo como la leyenda promete. Plan 9 del espacio exterior, su película más conocida, ofrece zombis, platillos volantes, curiosas teorías pseudocientíficas, económicos efectos especiales, actores que no tratan de disimular su aburrimiento, discursos apocalípticos, la última aparición de Bela Lugosi... en fin, que da todo lo prometido. Terrible, sí, pero queda algo loable, quizás ya perdido para nuestros días, en la evidente ingenuidad de su creador.

EL HOMBRE QUE SALVA A LA TIERRA
Miércoles 29 de abril, a las 15:00
en el Salón de Actos 'Juan de la Cierva'
Duración: 91 minutos.

PLAN 9 DEL ESPACIO EXTERIOR
Jueves 30 de abril, a las 16:00
en el Salón de Actos 'Juan de la Cierva'
Duración: 82 minutos.

ENTRADA LIBRE Y GRATUITA
VERSIÓN ORIGINAL
CON SUBTÍTULOS EN CASTELLANO

Próxima semana: documental alternativo.

lunes, 20 de abril de 2009

FUTURO DISTÓPICO

Esta semana, dos clásicos de la ciencia ficción en los que el mañana se ha convertido en una pesadilla aún peor que el hoy y quizás que el ayer, y de la que solo Charlton Heston puede salvarnos. O por lo menos hacer un intento y ponerse a dar voces...

En Cuando el destino nos alcance (Soylent green), la polución ha acabado con animales y vegetales, hay superpoblación en las ciudades y no es posible escapar de ellas, las mujeres son consideradas ‘mobiliario’, y la única fuente de alimentación es un peculiar producto sintético producido por la corporación Soylent que es en realidad... ahí lo dejamos para que Heston lo descubra. El irregular Richard Fleischer dirige este curioso y entretenido thriller; a destacar Edward G. Robinson en su última interpretación.

En El planeta de los simios, Heston es un astronauta que tras años perdido en el espacio llega a un planeta en el que, oh ironía, los monos son la especie inteligente que domina a los salvajes humanos. Sátira antibelicista con el final sorpresa que conocemos todos menos Homer, dirigida por Franklin J. Schaffner, y bastante mejor que las continuaciones y remakes que han venido después.

CUANDO EL DESTINO NOS ALCANCE (SOYLENT GREEN)
Miércoles 22 de abril, a las 14:45
en el Aula Magna (hangar)
Duración: 93 minutos

EL PLANETA DE LOS SIMIOS
Viernes 24 de abril, a las 15:00
en el Aula Magna (hangar)
Duración: 108 minutos

ENTRADA LIBRE Y GRATUITA
EN VERSIÓN ORIGINAL

CON SUBTÍTULOS EN CASTELLANO


Próxima semana: cine horrible.

martes, 14 de abril de 2009

YASUJIRO OZU

Esta semana, dos películas de Yasujiro Ozu, uno de los más grandes del cine japonés y de todo el mundo. Citado a menudo junto a Robert Bresson por la pureza de su estilo contemplativo, Ozu destacó como director de dramas familiares, con la crítica social surgida de la observación minuciosa de personajes y espacios.

He nacido, pero... comienza como una comedia sobre dos hermanos que tratan de adaptarse a su nuevo barrio y los conflictos que surgen con los demás chicos y en el colegio, para convertirse gradualmente en drama cuando contemplan el servilismo a que su padre está dispuesto a rebajarse con tal de complacer a su jefe. Muda (y sin música), la película es un gran ejemplo del dominio visual y narrativo de su director.

En Primavera tardía, una joven decide renunciar al matrimonio para quedarse con su padre, que intentará hacerle cambiar de idea. Señalada por algunos estudiosos como el comienzo de su periodo maduro, es en esta película donde Ozu se decanta definitivamente por la cámara estática, las tomas largas y las interpretaciones desprovistas de todo histrionismo para continuar analizando los cambios y contradicciones de la sociedad japonesa en particular y de la familia en general.

HE NACIDO, PERO...
Jueves 16 de abril, a las 16:00,

en el Salón de Actos 'Juan de la Cierva'

Duracion: 96 minutos


PRIMAVERA TARDÍA

Viernes 17 de abril, a las 15:00,

en el Salón de Actos 'Juan de la Cierva'

Duración: 104 minutos


ENTRADA LIBRE Y GRATUITA.
EN VERSIÓN ORIGINAL
CON SUBTÍTULOS EN CASTELLANO


La semana que viene: futuro distópico.

jueves, 2 de abril de 2009

JORNADAS DE ASOCIACIONES

Este viernes, 3 de abril, continuando con las Jornadas de Asociaciones, el Cine Club Aeronáuticos y la Asociación Cultural se encargarán de colocar stands detrás del hangar (ver foto inferior) para vender bebidas ligeramente espiritosas, bebidas no espiritosas en absoluto, bocatas y diferentes snacks para picar. Desde las 14 horas hasta las 19 horas, quien quiera podrá pasarse para consumir los apetecibles productos ofertados, socializarse un poco, que no está mal, y, en su caso, tragar cerveza para ahogar las penas/celebrar la euforia provocadas por el examen de STR. O por lo que sea...